¿Qué define un punto caliente para los nómadas digitales?

Además de Internet y el alojamiento, un entorno de trabajo productivo es sumamente importante para los nómadas digitales. Esto incluye, por ejemplo, una comunidad de personas con ideas afines y una buena infraestructura. Pero, en particular, esto incluye también lugares agradables para trabajar, como varios hot desks, oficinas dedicadas o un restaurante con buena comida, ya que los que trabajan también tienen que comer. Si quieres participar regularmente en actos sociales, reuniones con clientes, talleres y similares, debe haber locales adecuados y, por supuesto, alguien que lo organice todo y se sienta responsable.

No eliges un entorno de coworking/colaboración para sentarte solo delante del portátil todo el día. Normalmente puedes hacer eso en casa. Muchos de los primeros nómadas digitales han tenido la experiencia de ser el único nómada digital en un punto de encuentro de mochileros. Si todos los demás están durmiendo hasta el mediodía y luego de fiesta por la noche o en grandes viajes, entonces esto es un verdadero asesino de la productividad. En cambio, una comunidad de compañeros entusiastas te proporciona la motivación y la inspiración necesarias para ayudarte de verdad. Trabajar juntos no sólo es más divertido, sino que también te hace más productivo, creativo y exitoso. Eso no significa que nunca debas divertirte :-)

¡No queremos olvidar el equilibrio entre trabajo y vida privada! La vida no debe consistir sólo en trabajar. Muchos incluso sueñan con una semana laboral de cuatro horas y unos ingresos pasivos lo más estables posible. Pero, ¿qué haces con todo tu tiempo libre? Para no caer en un profundo pozo de aburrimiento, debes disponer de una oferta de ocio abundante, variada y emocionante. A muchos nómadas digitales les encantan los deportes acuáticos, por ejemplo: el surf, el kitesurf y el submarinismo son sólo los más populares.

Suele ser un factor infravalorado, pero es un criterio importante que no se puede ignorar. Para algunos es también el factor decisivo. Debes elegir un país en el que puedas comunicarte y entender el idioma, puedes aprovechar la estancia para desarrollar tus conocimientos lingüísticos. En principio, debes estar interesado en la cultura de un país si quieres permanecer en él varios meses. También debes ser capaz de desenvolverte y adaptarte a los modales y la idiosincrasia cultural de allí.

Por supuesto, el tiempo también es un factor importante a la hora de elegir un lugar adecuado para alojarse. Al fin y al cabo, el tiempo lo decides tú mismo y no tienes que aceptar las circunstancias, al menos hasta cierto punto. También la cuestión del clima vuelve a ser muy subjetiva. Algunas personas sólo se sienten cómodas a la sombra a 28 grados constantes, otras no toleran en absoluto los 25 grados permanentes. Por eso, en verano, lo más probable es que estén en los bastiones de los nómadas digitales en Europa, como Malta, Barcelona o Florencia. En invierno, lo más probable es que se encuentren en el Sudeste Asiático o en Latinoamérica, como Playa del Carmen.

El coste de la vida es uno de los criterios más importantes, sobre todo para los nómadas recién llegados. No es de extrañar, ya que no siempre es tan fácil ganar dinero como nómada digital, como les parece a algunas personas. Especialmente los primeros meses pueden ser duros. Entonces, por supuesto, ayuda enormemente vivir en un país donde el coste de la vida no sea tan alto, para que puedas arreglártelas con menos dinero al principio, mientras trabajas lenta pero seguramente en unos ingresos más altos. Por supuesto, también ayuda encontrar una comunidad local animada que pueda darte algunos consejos útiles.

Por último, pero no por ello menos importante, el tema de la seguridad tampoco es baladí, aunque tenga una importancia variable para cada nómada digital. Un entorno en el que te sientas seguro sin duda te ayuda a relajarte y a concentrarte en las cosas más importantes. Los nómadas digitales suelen ser viajeros experimentados, por lo que saben cómo comportarse sobre el terreno para minimizar el riesgo.